La instalación del alcantarillado en La Galia, tuvo ciertas dificultades al no estar urbanizado el territorio. La Galia es urbanizable, de hecho en el Plan General de Ordenación Urbana, se encuentran trazadas las calles que se ajustan bastante a las actuales, salvo en las dimensiones de anchura que la duplican. También existen calles, serán desarrolladas en un futuro, cuando se urbanice, eso si, sino se cambia el actual planeamiento.
En las calles que precisamente no están abiertas en la actualidad, es donde el alcantarillado ha presentado los problemas de su instalación. El propietario del terreno que más adelante, en la urbanización de la zona sería una calle, debía dar el permiso pertinente. Normalmente, no se ha procedido a instalar el alcantarillado en esas calles no abiertas todavía, salvo excepciones,
Hubo que trabajar para poder instalar el alcantarillado en una zona, conocida popularmente como el “Barrio de Abajo”. Sólo había una solución, que un propietario diera permiso para que más de 35 familias pudieran tener el servicio de alcantarillado, permitiendo el paso del mismo por su propiedad. Sin su consentimiento, esto no hubiera sido posible. La AAVV de la Partida de Altabix, mantuvo varias entrevistas, con el propietario a tal efecto, siendo los resultados, negativos para el interés común de los vecinos de la zona aludida.
Dado el alcance y la oportunidad, no olvidemos la subvención del alcantarillado por la Unión Europea, se procedió a reunir en asamblea a los vecinos afectados. En una primera asamblea, se planteó la necesidad de acudir a un abogado que mediara en el tema, con el abogado de la parte contraria. Y en una segunda asamblea, se tomo la decisión de contratar el servicio del abogado, con un coste asumido por los vecinos, procediendo un vecino a adelantar el pago de los honorarios.
Por último se realizó una asamblea, para proceder al cobro de los 100 euros por vecino y propiedad, que fue la cantidad que se abonó al abogado. Con anterioridad los vecinos afectados, firmaron un documento, por el cuál se adquiría un compromiso con el propietario que debía conceder el permiso.
Podemos decir, con cierto orgullo que gracias a las gestiones realizadas, agotando primero todas las vías de diálogo, se ha podido realizar la instalación del alcantarillado en la zona, siendo conscientes, del apoyo mayoritario que el vecindario dio, ya que de otro modo, no se hubiera realizado, porque nadie le podía obligar al propietario a firmar el permiso necesario, y la instalación del alcantarillado tenía un periodo de ejecución, transcurrido el cual, no se perdería la subvención dedicada por la Comunidad Europea.
Hay que añadir, que todavía quedan un grupo minoritario de vecinos que no han abonado la cantidad aludida, pero que se está en trámite de su abono, todo ello en la asamblea que tendrá lugar Dios mediante el domingo, 27 de enero de 2.008, a las 11 de la mañana, en el Centro Social Santa Marta.
En las calles que precisamente no están abiertas en la actualidad, es donde el alcantarillado ha presentado los problemas de su instalación. El propietario del terreno que más adelante, en la urbanización de la zona sería una calle, debía dar el permiso pertinente. Normalmente, no se ha procedido a instalar el alcantarillado en esas calles no abiertas todavía, salvo excepciones,
Hubo que trabajar para poder instalar el alcantarillado en una zona, conocida popularmente como el “Barrio de Abajo”. Sólo había una solución, que un propietario diera permiso para que más de 35 familias pudieran tener el servicio de alcantarillado, permitiendo el paso del mismo por su propiedad. Sin su consentimiento, esto no hubiera sido posible. La AAVV de la Partida de Altabix, mantuvo varias entrevistas, con el propietario a tal efecto, siendo los resultados, negativos para el interés común de los vecinos de la zona aludida.
Dado el alcance y la oportunidad, no olvidemos la subvención del alcantarillado por la Unión Europea, se procedió a reunir en asamblea a los vecinos afectados. En una primera asamblea, se planteó la necesidad de acudir a un abogado que mediara en el tema, con el abogado de la parte contraria. Y en una segunda asamblea, se tomo la decisión de contratar el servicio del abogado, con un coste asumido por los vecinos, procediendo un vecino a adelantar el pago de los honorarios.
Por último se realizó una asamblea, para proceder al cobro de los 100 euros por vecino y propiedad, que fue la cantidad que se abonó al abogado. Con anterioridad los vecinos afectados, firmaron un documento, por el cuál se adquiría un compromiso con el propietario que debía conceder el permiso.
Podemos decir, con cierto orgullo que gracias a las gestiones realizadas, agotando primero todas las vías de diálogo, se ha podido realizar la instalación del alcantarillado en la zona, siendo conscientes, del apoyo mayoritario que el vecindario dio, ya que de otro modo, no se hubiera realizado, porque nadie le podía obligar al propietario a firmar el permiso necesario, y la instalación del alcantarillado tenía un periodo de ejecución, transcurrido el cual, no se perdería la subvención dedicada por la Comunidad Europea.
Hay que añadir, que todavía quedan un grupo minoritario de vecinos que no han abonado la cantidad aludida, pero que se está en trámite de su abono, todo ello en la asamblea que tendrá lugar Dios mediante el domingo, 27 de enero de 2.008, a las 11 de la mañana, en el Centro Social Santa Marta.
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